¿Sabes cómo cuidar el cabello de los niños? Aquí algunos consejos claves para mantener y mejorar el aspecto y sanidad del pelo de los peques de la casa.
Ya hemos hablado sobre varios temas relacionados con nuestros consentidos y cómo cuidarlos mejor: accesorios de moda para niños; cosméticos para niños (en este artículo, por cierto, tocamos también el tema del cabello pero con mucha menos profundidad); rutinas de belleza para niños (aquí pasa lo mismo, podéis encontrar alguna información sobre cómo cuidar el cabello de los niños)…
Por eso ahora hemos decidido enfocarnos en el cuidado de su pelo enteramente. Si tenéis dudas al respecto, no dudéis en consultarnos, que hemos investigado bien.
Cómo cuidar el cabello de los niños
Es una duda más frecuente de lo que parece. Basta tocar o mirar el pelo de un niño para entender enseguida que es diferente al de un adulto. Entonces se plantea el quebradero de cabeza de algunos padres: cómo cuidar el cabello de los niños para poder peinarlo mejor, que se mantenga bonito y saludable. Si pensáis que este tema no es importante, estáis un poco lejos de varias realidades.
- De la importancia de la higiene del cabello de los peques.
- Lo importante que es mantenerlo manejable para poder peinarles mejor y ahorrar tiempo y esfuerzo.
- De ayudarles a crear sus propias rutinas de higiene y belleza.
- Cuidando a los más pequeños les enseñamos, con el ejemplo, a quererse y cuidarse a sí mismos como un acto de amor.
Cómo cuidar el cabello de los niños: Factores a tener en cuenta
- El largo del cabello.
- La cantidad.
- El grosor.
- Nivel de actividad.
- El clima.
- Tonalidad del cabello: clara u oscura.
Hay que comenzar observando estos factores y orientando los productos y cuidados de la forma más personalizada posible. Es importante crear hábitos de cabello saludables desde el principio.
Cómo cuidar el cabello de los niños: Nuestros principales consejos
El lavado: con champú y acondicionador
Hay que partir del tipo de cabello del niño: liso, rizado, graso, seco. Hay productos especiales para cada uno de ellos y usarlos siempre dará mejor resultado.
La frecuencia para lavar el pelo del niño varía en función de: nivel de actividad y edad. Las necesidades varían de un niño a otro. A veces los cambios en el clima también pueden hacer que cambiemos la frecuencia del lavado del cabello de los peques.
Algunos ejemplos:
- El cabello graso y liso se debe lavar con champú una vez al día o cada dos días.
- Cabello liso y no graso se puede lavar con champú una o dos veces por semana.
- Cabellos afroamericanos, rizados o secos se deben lavar con champú cada 7 a 10 días.
El cabello debe enjuagarse con agua abundante y acondicionarse después de la sudoración intensa o actividades como la natación.
OJO: Debéis controlar cómo responde el cabello de vuestros hijos a las frecuencias de lavado con champú recomendadas y realizar los ajustes necesarios. El clima o los cambios en los niveles de actividad pueden requerir un cambio en la frecuencia del lavado con champú también.
- Si notáis que el cabello y / o el cuero cabelludo son grasosos, agregad un champú adicional por semana hasta que desaparezca la grasa.
- Cuando hay signos de sordera, desprendimiento o sequedad, quitad un champú por semana hasta que el cabello se sienta mejor.
Champús amigables para los niños y su tipo de cabello
Tened en cuenta el aroma, la suavidad y el tipo de cabello del niño al elegir un champú. Por ejemplo:
- Si vuestro hijo tiene el cabello seco, mejor un champú hidratante. Hay muchos champús para niños en el mercado y encontrar el mejor champú requerirá prueba y error.
- Cuando existe una condición en el cuero cabelludo como psoriasis, dermatitis o caspa, lo mejor es consultar a un dermatólogo sobre el mejor champú.
- Si vuestro hijo tiene el pelo fino, probad un champú ligero.
Sea cual sea el champú elegido, aplicarle unas gotitas de árbol del té parece que es bueno para prevenir los piojos.
Champú bien aplicado
Hasta que no estamos seguros de que han aprendido bien a hacerlo por sí solos, no deberíamos dejarles. Es importante asegurarse de que el cabello está bien lavado y eso pasa por una buena aplicación del champú. ¿Cómo hay que hacerlo?
- De ser posible, con abundante agua tibia. Cuando ya el pelo esté bien mojado.
- Rociando una cantidad de champú de un cuarto del tamaño de la mano.
- Con un masaje enérgico (que no fuerte) en el cabello y, sobre todo, en el cuero cabelludo. Para cuidar el cabello de los niños lo mejor es hacerlo con las yemas de los dedos. No rascar con las uñas.
- Enjuagar muy bien.
- Si el niño tiene mechones rizados apretados, no juntéis el pelo sobre la cabeza del niño. Esto puede hacer que el cabello se enrede.
- Ajustad la cantidad de champú según el cabello del niño. Por ejemplo, un niño con cabello más grueso puede necesitar más de un cuarto del tamaño de la palma de la mano de champú y un niño con cabello fino puede necesitar menos.
Un cuero cabelludo con picazón, seco o escamoso puede ser una señal de que no se enjuaga todo el champú.
Acondicionador: ¿sí o no?
El tipo de cabello del pequeño os dirá si es necesario o no usar el acondicionador. Los cabellos tipo afroamericanos, rizados y secos deben hidratarse después del champú. El acondicionador agrega brillo y suaviza, además del cabello, las cutículas.
Las necesidades de acondicionamiento del cabello pueden cambiar debido al clima. El cabello puede necesitar acondicionador durante los meses más fríos o en climas más secos.
El acondicionador más adecuado
Para cuidar el cabello de los niños es clave evaluar siempre y no generalizar los cuidados. Hay, por ejemplo: acondicionadores sin enjuague, profundos e instantáneos.
- Si el niño tiene el cabello extremadamente seco, lo mejor sería un acondicionador profundo. Aplicadlo siguiendo las instrucciones del bote. Los acondicionadores profundos generalmente permanecen en el cabello durante unos 15 minutos antes de enjuagar. Se pueden usar después de cada champú o una vez al mes, dependiendo de la condición del cabello del peque.
- Los acondicionadores sin enjuague, por otra parte, se mantienen y no se enjuagan. Pueden facilitar el proceso de desenredado de cabellos finos.
- En el caso de los acondicionadores instantáneos, cubren el cabello y crean suavidad y brillo. No deben dejarse en el cabello por mucho tiempo antes de enjuagarlos. Son aceptables para cabellos más grasos, que no necesitan mucha hidratación extra. Si es el caso de vuestro niño, aplicadlo solo en las puntas.
Aplicad bien el acondicionador
Esto debe hacerse: sobre el cabello recién lavado, una vez exprimido el exceso de agua. Para aplicarlo, lo mejor es dividir el cabello en secciones y luego aplicar una cantidad de acondicionador del tamaño de la palma de la mano en cada sección. El cabello más grueso y rizado debe dividirse en secciones más pequeñas para distribuirlo mejor. A diferencia del champú, el acondicionador no necesita aplicarse en el cuero cabelludo.
El cabello más grueso y con mucha textura puede necesitar más acondicionador que el cabello fino y delgado. Ajustad la cantidad de acondicionador según el tipo de cabello.
Hidratación profunda periódica
¿Otra idea? Para cuidar el cabello de los niños, se puede aplicar también un tratamiento con algún aceite o mascarilla hidratante una o dos veces al mes. Sirven para esta tarea el aceite de oliva, el de coco o el de jojoba. Una vez aplicados, deben masajearse en el cuero cabelludo y el pelo. Pueden cubrirse con un gorro de ducha o una toalla tibia para potenciar el efecto y dejarse reposar por unos 20 minutos para luego aclarar bien.
Sabemos que los niños no suelen quedarse muy quietos ante este tipo de actividades. Una recomendación: Hacedlo conjuntamente e invitadles a disfrutar de esta actividad de cuidado mutuo.
Cuidado después del lavado
Para cuidar el cabello de los niños después del lavado lo mejor es cubrirlo con una toalla. Podéis ayudarles -o directamente- envolver una toalla alrededor de su cabello mojado. Esto ayuda a absorber el agua. Pero, frotar el cabello con una toalla puede dañarlo y romperlo.
Peinad el cabello húmedo suavemente
Usad un peine de dientes anchos, especialmente en el cabello rizado. No tiréis con fuerza.
¿Otros consejos para cuidar el cabello de los niños?
- Trenzas y coletas sí, pero no tan apretadas. Usad gomas que no maltraten el cabello. (Si os gustan los peinados de niñas, aquí tenéis varias buenas ideas)
- Considerad los estilos que no requieran tratamientos térmicos y químicos. No es sano someter a los peques a este tipo de tratamientos. Además, lo mejor será siempre ayudarles a amarse tal y como son, en su versión más natural.
- Si por lo que sea, tenéis que usar calor en sus cabellos, que no esté a tope.
- Cuando los niños hacen natación, es clave lavar bien su pelo de los químicos.
- Cuando estéis al aire libre, usad un sombrero para proteger el cuero cabelludo y el cabello del sol.
Esperamos que con estos consejos para cuidar el cabello de los niños tengáis las ideas más claras. Contadnos si tenéis algún truquillo más bajo la manga.